El bautismo es una fiesta de la vida, en la que una persona (bebé, niño o adulto) se incorpora a la familia de los seguidores de Jesús de Nazaret, la Iglesia. El bautismo es el inicio de una historia de amor, en la que los protagonistas son Dios, el bautizado y todos los cristianos.
En el bautismo decimos que comienza la vida, reconocemos quién es la Vida, nos ponemos del lado de la vida y pedimos fuerza para colaborar con la vida. El bautismo es una fiesta de la vida.
Nos habla del comienzo de un vida nueva que nos hace hijos y hermanos, que pueden llamar a Dios “Padre”: miembros de una comunidad de seguidores de Jesús abiertos a la esperanza, unidos en la fe y movidos por el amor.
Al pedir el bautismo para vuestro hijo os comprometéis a educarlo en la fe y en el evangelio. No estáis solos, la comunidad cristiana también os ayudará.