22 de enero de 2012 – Marcos 1, 14‑20
Infancia Misionera
Octavario oración por la unidad de los Cristianos
Teresa comenzó a tocar el violín de niña, fue al conservatorio y se sacó los títulos necesarios. Hoy dirige coros y participa en proyectos musicales. Pero, ante todo, ha descubierto su vocación profesional en educar y ayudar a niños con deficiencias desde terapias musicales. Es la música social, solidaria, al servicio de todos. Una buena profesional que vive su vocación al servicio de las personas.
El evangelio nos presenta aJesúsque llama a los discípulos para hacerlos “pescadores de hombres”. Su formación fue compartir la vida y los afanes de Jesucristo. Un aprendizaje día a día. Escuchar la predicación del Maestro, contemplar sus acciones, sentir cómo curaba enfermos y sorprenderse por su costumbre de estar cerca de los pecadores. Así formaron un equipo de doce, tan plural como determinante en el comienzo de la Iglesia. Enseguida pusieron su formación y su experiencia al servicio de todos. Repitieron las palabras deJesús, actualizaron sus gestos, e invitaron a gente de toda raza y condición a vivir el Evangelio.
En el día de la Infancia misionera, niños, jóvenes y adultos, nos sentimos llamados a anunciar el Evangelio de Jesucristo. Él es quien nos une a los hombres y mujeres que formamos parte de las diferentes confesiones cristianas. Él nos llama y nos convoca para ser signo del evangelio hoy. Él nos invita a ser “pescadores de hombres”, testigos de su Palabra y artesanos de su amor. Entre todos, juntos, reflejamos mejor el Evangelio que nos une. Hoy rezamos por la unidad de los cristianos y nos comprometemos en vivir más unidos la fe.
Especialmente oramos por la comunidad cristiana de Teruel en esta semana que celebran a su patrona, Santa Emerenciana. Ella os sigue bendiciendo.
Feliz Semana.